• En México se celebra desde hace más de 40 años y fue instaurado para conmemorar a una de las escritoras más influyentes de la literatura en español.

Cuando nos adentramos en las páginas de un libro no solo podemos adquirir conocimiento, sino que también logramos echar volar nuestra imaginación al crear escenarios, situaciones y personajes quienes, casi de forma mágica, cobran vida en nuestra mente y nos cuentan una historia. Así de grandiosos son los libros.

No cabe duda de que, a través de la lectura, somos capaces de adquirir conocimientos sobre muchos temas, lo que convierte a los libros en una herramienta fundamental para brindar educación a las personas, desde aquellas que apenas comienzan a desarrollar su habilidad por la lectura hasta para las más ávidas lectoras; para los libros no hay distinción.

También se puede alimentar el intelecto de quienes recorren sus páginas ya que les permiten desarrollar su habilidad de reflexión, análisis, concentración, al mismo tiempo que los entretiene y atrapa con cada línea que leen. Por esta razón, los libros se han convertido en una parte fundamental de nuestra vida y merecen ser celebrados.

Alrededor del mundo, existen diversas fechas para conmemorarlos. Específicamente para nuestro país esta tiene lugar en noviembre desde hace más de 40 años. Fue en este mes, pero de 1979, cuando bajo un decreto del entonces presidente, José López Portillo, se instauró el 12 de noviembre como el Día Nacional del Libro.

Cabe destacar que esta fecha no fue elegida al azar, sino que fue pensada con la finalidad de rendir homenaje a una de las figuras más importantes de la literatura no solo de nuestro país, sino de la literatura en español, sor Juana Inés de la Cruz, quien nació en el Estado de México el 12 de noviembre de 1648.

Con su instauración, el gobierno de nuestro país quiso rendirle tributo, además de a la gran destreza que “la décima musa” o “la fénix de América” como también se le conocía, tenía con la pluma, también quiso reconocer las adversidades que tuvo que enfrentar al estar en un ambiente donde la educación estaba reservada únicamente para los hombres, por lo que su camino literario le resultó difícil y, desde luego, controvertido.

Cuando un libro nos atrapa se puede convertir en una experiencia fascinante y aunque desarrollar el hábito de la lectura puede representar un reto, cuando se logra se convierte en uno de los pasatiempos que más beneficios aporta. Además de los que ya se mencionaron, también se encuentran el que nos permite ejercitar el cerebro, desarrollar habilidad de concentración, facilita la comprensión de ideas e información, estimula la capacidad de análisis, fortalece el pensamiento lógico y creativo; además, también favorece a la habilidad de escritura y redacción, entre otros.

En el marco del mes del Día Nacional del Libro, el instituto Natura México, que tiene como uno de sus objetivos el apoyo para la implementación de políticas educativas transformadoras a escala y que actualmente ya trabaja con cinco estados del país para lograrlo, invita a que veamos en los libros una oportunidad de crecer como individuos y sociedad, por lo que todos debemos de asumir con responsabilidad el trasmitir a más personas la importancia de la lectura más allá de una fecha en particular; pero, sobre todo, de que juntos trabajemos con el objetivo de garantizar el fácil acceso a los libros en beneficio de nuestra sociedad. Los libros son un elemento con una de las mayores importancias dentro de las políticas que apoya el Instituto. A leer se aprende, y hay que darnos el tiempo para ello.

¡No existe mejor forma de honrar esta celebración que leyendo un buen libro!

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