El plástico forma parte importante en la vida de todos los seres humanos. Una de las formas que se nos viene a la mente es la típica bolsa, presente para guardar la basura, el sándwich para el lunch, los víveres en el supermercado, ropa mojada, por mencionar algunos de sus usos más comunes. Estamos acostumbrados a utilizar una sola vez la bolsa para luego desecharla, lo cual genera un problema ya que no se biodegrada con facilidad.
De acuerdo con la ONU Medioambiente, 50% de los plásticos que consumimos son de un solo uso; se prevé que para 2050 existan 12,000 millones de toneladas de basura plástica en tiraderos[1], causando un impacto ambiental importante. Hoy, nuestra relación con este artículo da un giro, a partir de este año entró en vigor la Ley de Residuos Sólidos en la CDMX, que prohíbe la comercialización, distribución y entrega de bolsas de plástico desechables.
Es por eso, que Veolia, compañía experta en el manejo eficiente del agua, residuos y energía, nos comparte las siguientes alternativas para poder cargar con nuestras cosas sin contribuir al uso excesivo de bolsas de plástico.
- En caja por favor. Son ligeras pero sumamente resistentes, su forma regular ayuda a distribuir mejor tus productos y a desperdiciar menos espacio, por lo que no es necesario usar tantas cajas, sin olvidar que el 100 por ciento del material puede ser reutilizado.
- Bolsas de red para las verduras. Usa una distinta para cada tipo de producto, ya sean verduras o frutas, y manéjalas con cuidado para evitar que se rompan. Puedes lavarlas e inclusive guardar tus víveres en ellas dentro del refrigerador.
- Lleva tus tuppers contigo. Estos recipientes ayudan a organizar mucho mejor las cosas dentro del refrigerador y cumplen con la regla de ser reutilizables por mucho tiempo, además si son de vidrio ayudan más al medio ambiente. Al comprar productos como queso o jamón, pide que te lo guarden en ellos.
- Bolsas de tela/carrito de mercado. Debido a que están hechas con algodón, estas bolsas son biodegradables, pero este no es su único beneficio, son mucho más resistentes que las bolsas de plástico, por lo que aguantan más peso, mientras que los carritos de mercado son muy prácticos para poder trasportar tus compras con menor esfuerzo.
- Bolsas de papel. Quizá no son tan resistentes como una bolsa de tela, sin embargo son una excelente opción que ofrece otros grandes beneficios, uno de ellos es que absorben las emisiones de CO2, lo que contribuye a que la huella de carbono disminuya.
Recuerda que la suma de pequeñas acciones puede lograr grandes cambios.